7 MISTERIOS DE LOS MAYAS

 Antes de que en 1511 los españoles llegasen a las desconocidas costas de Yucatán, la civilización maya arrastraba más de 3 mil años de una evolución que incluía un sistema de escritura propio, un estudio de la astronomía reflejado en sus calendario (sí, el de 2012) y un sistema agrícola totalmente consolidado.

Salpicando la costa este de México, especialmente la península e Yucatán, Belice, Guatemala y parta de Honduras y El Salvador, la herencia maya incluye highlights turísticos como el Templo de Kukulkán, en Chichén Itza, o la ciudad de Tikal, en Guatemala, dos piedras angulares de una cultura maya que aún conserva estos 7 misterios que nos harán viajar en el tiempo.

Una cultura que prevalece

Aunque se tienda a pensar que la cultura maya fue extinguida por sus propios miembros y por el imperio español, lo cierto es que los números no dicen lo mismo.

En Guatemala, por ejemplo, 14 millones de personas siguen siendo mayas, a juzgar por los rituales, festivales y estilo de vida que siguen fomentando lejos de las grandes ciudades y atrapados en medio del trópico. 

El tesoro perdido

Según diversas lecturas mayas sustraídas por un equipo de la universidad alemana de Dresden, el lago Izabal ubicado en Guatemala podría contener los restos de la ciudad de Atlan, sumergida en el mismo tras un terremoto que asoló la zona en el 666 a.C.

Lo curioso reside en la posibilidad de que esta ciudad contenga 2156 lingotes de oro, según las escrituras, un tesoro que podría equivaler perfectamente a 290 millones de dólares. 

La ubicación de la Atlántida

La existencia de una ciudad sumergida como Atlan, de nombre sospechosamente parecido a la Atlántida, podría indicar también una posible ubicación de la archiconocida (y buscada) ciudad que Platón mencionara en sus Diálogos.

Una jeroglífico maya encontrado en Tikal mostraba a un hombre escapando de un volcán en erupción mientras una pirámide se derrumbaba hasta sumergirse en el lago, mientras la presencia de escenas de elefantes (un animal que no existía en Centroamérica pero sí en la Atlántida), también destapó sospechas y diversas investigaciones que aún tratan de aclarar los rumores.

La importancia de la sangre

El sacrificio humano en la cultura maya como tributo a sus muchos dioses era costumbre en una civilización en la que la sangre simbolizaba un elixir de adoración.

Además del consecuente sacrificio de niños a los que se les extraía el corazón, o súbitos a los que se arrojaba a esas cuevas llamadas cenotes, también existían diversos juegos de pelota en canchas deportivas de las grandes ciudades en las que el objeto por parte de los mandatarios era sacrificar a los que perdían o, también, a los vencedores, quienes buscaban el sacrificio por el simple hecho de "morir en una ciudad tan sagrada como Tikal". 

Sombras en las pirámides mayas

La pirámide de Kukulkán, en Chichén Itzá, fue erigida para realizar diversos eventos astronómicos aprovechando la situación deliverada de un monumento alineado a la perfección con los astros, especialmente con un sol que durante los equinocios reflectaba la forma de una gran serpiente transparente flotando sobre las diferentes terrazas superiores del monumento más visitado de Yucatán. 

¿Y el 2012?

A pesar del "pánico" colectivo desatado en Occidente durante los años previos al 2012 tras descubrir en fin del calendario maya encontrado por los arqueólogos, lo cierto es que estos sistema astrológicos (entre los que destacan otros más concretos como el calendario solar, de 365 días, o el ceremonial, de 260) comprendían una franja temporal de 5.125 años en el sistema solar (algo así como nuestro propio concepto de milenio). Un calendario que nunca marcó el fin de la Tierra, sino el de un ciclo que terminaba para volver a renovarse. 

La decadencia

Pocas décadas antes de la llegada de los españoles, la civilización maya comenzó a experimentar una decadencia cuyas causas pueden ser varias: desde guerras entre diversos pueblos (como fue el caso de Yucatán) hasta un superpoblación que terminó degradando el entorno.

Una curiosa teoría sostiene que este atravesó un período de sequía intenso (provocado por el huracán El Niño), a juzgar por los vestigios de materiales bajos en titanio encontrados en el interior del Agujero Azul de Belice, perfectamente alineado con la antigua ciudad guatemalteca de Tikal. 

Estos 7 misterios de la cultura maya nos sumergen en esa civilización encerrada en las selvas de Centroamérica cuyo desarrollo de la escritura, la astronomía o férreas creencias religiosas la convirtieron en una de las sociedades más intrigantes del mundo antiguo. Y algo nos dice que, aún hoy día, numerosos misterios siguen respirando entre el trópico y bajo los cimientos de todos esos vestigios eternos.